Este proyecto nace de una práctica personal, a manera de diario íntimo, en el dibujo, la fotografía y la escritura.

Las imágenes habitan un espacio difuso que cobra sentido a través de la narración en primera persona. Hoy es un relato incompleto, siempre abierto. Su rumbo se insinúa en la yuxtaposición de las imágenes, en la dirección que señala la secuencia.

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El contenido es apenas un pretexto para explorar las posibilidades expresivas de los medios disponibles, sin mayores pretensiones, y recuperar la práctica como vehículo para expresar la vida, en mi caso, desde mi cuerpo y mi experiencia de mujer.

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Por ahora, se asoman preguntas en torno a las palabras como vehículo de la imagen. ¿Cómo pueden la pintura y la fotografía convertirse en espacio para las palabras? ¿Cómo pueden encontrarse la plástica y la fotografía? ¿Qué sentido tiene la práctica del arte para mí?


 

This project emerges from a personal practice, like an intimate diary, through drawing, photography, and writing.

The images inhabit a diffuse space that gains meaning through first-person narration. Today it is an unfinished story, still open. Its direction is hinted at in the juxtaposition of images, in the path suggested by their sequence.

 

The content is merely a pretext to explore the expressive possibilities of the available media, without grand ambitions, and to reclaim practice as a vehicle for expressing life— in my case, through my body and my experience as a woman.

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For now, questions arise around words as a vehicle for images. How can painting and photography become a space for words? How can visual art and photography meet? What meaning does the practice of art hold for me?